El burro Pepe Trueno
insistía: "Creo que deberías renunciar...", pero Tiro
Loco, un agente público de dibujos animados, no escuchaba y con voz
caballuna respondía: "¡Yoooo soy el único que cree o piensa
aquí, Pepe Trueno! ¡Y tuuuuuú no debes olvidarlo!".
Tiro
Loco, caballo blanco con la crin negra, el morro redondeado y cuello
largo, adornado con un pañuelo de color azul claro o naranja, lleva
sobre sus caderas las pistoleras armadas y preparadas para la acción.
Pero sus piernas son cortas y no tiene manos sino cascos con
pulgares. No es de extrañar, por tanto, que a la hora de disparar se
muestre algo torpe.
Lamentablemente
le sucede lo mismo a la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e
Igualdad: Ana TiroLoco Mato, que tampoco ha querido dimitir tras los
desatinos en la rueda de prensa sobre la enfermera contagiada por
Ébola. Y no lo ha querido hacer tampoco en otras muchas ocasiones
en las que, igual que aquel caballo animado, ha dado muestras de ser
lenta al hablar por ser lenta al pensar, y cuando
finalmente logra sacar su pistola de la funda, suele tirar al hombre
equivocado o incluso a sí misma.
Memorable
fue aquella comparecencia ante los medios de comunicación, en mayo
de 2012, cuando comenzó diciendo: "Buenas, buenas días, buenas
tardes a todos. En primer lugar agradecerles... Vamos, hemos
universalizado la sanidad para los españoles. Saben ustedes que la
sanidad es universal y que estaba recogida en muchas leyes pero nunca
se aplica hasta el final. Todos los españoles tienen derecho a
asistencia sanitaria gratuita. Todos sin dejar uno”. Luego resultó
que se impuso el copago sanitario, el euro por receta, las
restricciones de atención a determinados colectivos...
Pero
es que la ministra de Sanidad también ha hablado de "parados
sin prestación parlamentaria", "pensionistas que ya no
tienen derecho a prestación por desempleo" o que "no es lo
mismo una persona que no está enferma en su consumo de medicamentos
que una que lo está".
¿Qué
más decir? La rueda de prensa de Ana TiroLoco Mato sobre el Ébola
no ha hecho más que inquietar a la opinión pública. Cuando se le
preguntó si se ha podido contagiar más gente no supo responder,
pero los datos que se han publicado son tremendos: la
enfermera tenía síntomas desde el día 30 de septiembre y estaba de
vacaciones. Nadie
tomó medidas preventivas para actuar rápidamente y preservar la
salud de la chica.
Además,
el Ministerio de Sanidad ha demostrado su incompetencia al reconocer
que no son necesarias las habitaciones de presión negativa y todos
los medios de los que antes presumían.
Lo único que se ha hecho en este y otros temas es pasar la pelota de
un lado a otro sin reconocer que han fallado. Lo mismo, mismito, que
el inepto agente animado público Tiro Loco McGraw.